Un Vaquero con suerte.

Si hay una cosa en la que podemos estar de acuerdo todos aquellos con mascotas en casa es que verlas enfermas nunca es agradable, pero cuando hay sangre de por medio, es seguro que hay que buscar ayuda. Al menos así fue el caso con los propietarios de Vaquero, este pequeño pomeranian tras las rejas con mucha suerte de tenerles a ellos como dueños.

¿Por qué vino a nosotros? Sus padres adoptivos lo trajeron al notar que vomitaba mucho… y que comenzó a evacuar sangre. Tras un par de estudios pudimos diagnosticar a Vaquero con ehrlichiosis canina, una enfermedad potencialmente fatal si no se trata inmediatamente. Con signos como fiebre, letargo, hemorragias o hasta convulsiones espontáneas, puede producir anemia, afectar la médula ósea y el sistema inmunitario.

Por suerte se puede tratar con una serie de antibióticos, así que comenzamos el tratamiento para Vaquero cuanto antes. Luego de 2 días de hospitalización, este carismático perrito se encontraba mucho mejor. Lo suficiente como para enviarle de regreso a casa a continuar su tratamiento.

Vaquero siguió compartiendo tiempo de calidad con su familia, comiendo, bebiendo y hasta evacuando como si nada le hubiera pasado. Para alguien que enfrentó una enfermedad mortal, sin duda luce estupendo.